
Fajar es tocar. Sentir y acariciarse mutua y voluntaria mente.
Es algo en que los dos están de acuerdo, se sienten cómodos y seguros de lo que hacen. Es un momento de intimidad, de acercamiento físico y emocional súper fuerte, donde la relación evoluciona y alcanza otro nivel.
El faje es como meter el pie al acelerador, y según sea la estimulación, te puedes quedar en esta etapa por un buen rato, como dando acelerones.
Si el faje continua, llegas a entender por que se divide vulgarmente “estoy caliente”. Materialmente sientes que tus genitales se están quemando, la temperatura del cuerpo sube entre otras cosas y la excitación sexual también.
Muchos hombres creen que el faje consiste únicamente en tocar el “combo 1” conformado por partes mega obvias y súper privadas. Sin embargo, cada persona tiene diferentes zonas sensibles que, tocas correctamente, también puedes ser súper estimulantes.
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